Papito, ya estás en los brazos del señor gozando de paz y armonía, mereces ser libre y sembrar el cielo de tu bondad. Gracias por toda tu entrega a nosotros, por tu amor y ser el gran padre, esposo, yerno y abuelito que fuiste, gracias por dejarnos con el corazón lleno de amor y haber formado una bella familia. Descansa en paz Negruncho.