Luis Gatito Piffault Ojeda, hijo, hermano, esposo, padre, abuelo y gran amigo. Dejas atrás a un legado que formaste con amor, valores, metas y tu gran esfuerzo por formar a la familia que tienes hoy. Aquí todos mantendremos vivo tu recuerdo y siempre te tendremos en nuestros corazones, tu espíritu vive con nosotros, el cual le transmitiremos con mucho orgullo a las siguientes generaciones, nos encargaremos de que te recuerden con tu gracia, tu humor característico, tu talento y amor por el fútbol, por tu lealtad hacia la U de Chile y por tu querido Club Arcoiris que ayudaste a fundar para que otros disfruten de un espacio para seguir con tu deporte tan amado. Cuidarás de arriba a las personas que amas, a los que viste nacer, criaste, acogiste y ayudaste. Tomaste tu lancha y fuiste a navegar entre las estrellas para pescar una.